El próximo domingo en el redondel de Zapote, Steven Leiva tendrá el reto más importante desde que comenzó a montar hace ocho años.
Será el encargado de enseñar a su majestad “El Malacrianza”–toro que ha cobrado dos vidas y causado a un sinnúmero de montadores importantes fracturas– quién manda en el redondel.
Con 22 años, Leiva montó este viernes en Paso Hondo y nos dijo que la noticia más que ponerlo nervioso, es un gran responsabilidad. “Hay que relajarse nada más, porque si uno va con miedo, lleva las de perder. Me llamaron a mi casa y me dijeron: es el afortunado que montará a “El Malacrianza’, ¿acepta? Es una gran emoción”, dijo el joven de Lagunilla de Santa Cruz y que trabaja en los campos de golf de Hacienda Pinilla.
Desde los 14 está en la práctica, por lo que la experiencia es un punto a su favor.
Cuando le consultamos que piensan sus padres al respecto, sus compañeros no tardaron en reír. “Es que en la casa no saben, era un secreto”, manifestaron.
“Me siento capaz de mantenerme el máximo tiempo posible sobre ‘El Malacrianza’”, asegura este montador cuya madre ya se resignó a que monte el peligroso toro, según nos explicó.
“Antes de la corrida, siempre me da una bendición y comenzamos”, añade.
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